26 de septiembre de 2021

dejar la quemona completa? choices

otra vez yo escribiendo directo en el editor de blogger, hoy con mi pie entre las patas delanteras de Rome, super acalorado, fantaseando con un porro que tengo en el cenicero y que dejé listo para este preciso instante. 

me pregunto por el espectro de nuestros sentimientos, ¿desde donde y hasta donde sentirás?
me pregunto por tu cansancio, por lo predecible que me vuelvo, por la diversión en otras miradas. 

otra vez yo acalorado.
otra vez yo pensando en otros pisos térmicos. 

será que lo que yo quiero es irme lejos?
quizás...

me pregunto por la labor de amar, por la delicada y trabajosa labor de amar. 
me pregunto por tus sueños, por mis sueños, por sus sueños. 
me pregunto: ¿cómo hacer para encontrarnos suavemente?

no sé por qué pero yo sé que me piensas, que me pensaste y que me pensarás. 
de pronto no seré tu obsesión para siempre, 
quizás ya no seré objeto de tu romance desmedido,
tal vez no seré más el destinatario de tus cartas, 
pero confirmo que me vas a pensar. 

confirmas?
urg
chao




(obviamente me puse a llorar al terminar este texto)

9 de septiembre de 2021

viajemos

estoy pensando en nosotros en el mar...

en el proceso curativo de fijar nuestras miradas en los ojos del otro con la posibilidad de voltear hacia el mar.

estoy pensando en la proximidad, en la facilidad con la que se nos da encontrarnos y suavizar unas cosas a través de nuestras suaves pieles, de nuestras suaves caricias.

la idea de encontrarnos en el mar es reconfortante y me abraza cuando no estás.


pienso en nuestros cuerpos relajados, 

en nuestras cabezas apoyadas en el otro (no solo por el peso físico sino también por el compartir de los pensamientos),

en la posibilidad de una siesta después de nadar.


yo no estoy dispuesto a permitir que la distancia me incomode demasiado, 

me siento capaz de amarte aunque vivamos en galaxias distintas,

incluso siento que gracias a todo lo que hemos compartido puedo mantener un recuerdo vigente de como se siente compartir juntos, 

incluso recurro a las fotos y los videos porque ellos también me acompañan.


quiero recrear ese escenario playero mil quinientas noventa y ocho veces y no específicamente en mi mente. 

viajemos. 


1 de septiembre de 2021

amar y ceder


ceder? ceder que? un enchufe? una luz? un porro pegado por otre? 


ceder bajo la consciencia de la ausencia. 

ceder bajo la consciencia de la ausencia. 


ahora me voy pero otros días vuelvo, ahora me estoy yendo pero otros días he llegado. 


me sorprende lo cierta que es esa frase de que hay tiempos para todo en esta vida. 

y es que el tiempo y su abrumadora característica subjetiva sigue arrastrando unos lineamientos universales. 


la situaciones, la espera, la paciencia, son finitas, duran un lapso y luego terminan. 


aun así hay otros elementos con posibilidades infinitas (o al menos apariencia) como el amor. 


el amor en mi es infinito, es inagotable, es como la imagen mental de tomar agua directamente de un brote de musgo sin temor a morir. 


el amor en mi crece y se empina para ser más grande, me supera como 8 veces en estatura como si fuera difícil. 


el amor en mi fluye como una progresión de acordes pensada por Sara en las horas de la tarde. 


el amor en mi se proyecta en acciones, en canciones, en rimas y chistes fallidos, en perreos intensos, en preparaciones y gesticulaciones manuales. 


el amor en mi es abrumador y consumidor irresponsable de mi tiempo mental. 


el amor en mi me facilita ceder, ceder unas cosas pa aproximarme a otras. 


el amor en mi abarca kilómetros, décadas y amplitudes de onda. 


te cedo este escenario mental de aterrizar en una ciudad europea con el mar en la cara, ahí sabes patinar y puedes transportarte a donde quieras, conoces personas, ves caras, pruebas alimentos inimaginados. te cedo este escenario donde puedes construir una identidad a partir de lo que eres hoy y no de lo que fuiste ayer. te cedo este escenario donde en el aeropuerto no es una sorpresa que seas esta persona física y todavía te llames sofia. te cedo este escenario en el que tu nombre sea incuestionable y bello para quien lo conozca. te cedo este escenario en el que puedes ir por ahí sin top y nadie te va a mirar de más. te cedo este escenario aunque es mío porque encuentro sosiego en el y no veo por qué no ceder algo que solo te puede traer bienestar. 


te cedo mi tiempo y mi corazón. 

te cedo mis sueños y mi disposición.